Una sola frase…
bastó para herir mi corazón
y dejarlo casi sin latidos,
provocando una sensación de ahogo
coloreando en forma amarillenta
lo vivido,
deteniendo el tiempo,
separando el ayer
de ese encuentro,
convirtiendo el final
en un comienzo
que me lastima
por que de apoco
te voy perdiendo.
Una sola frase…
bastó para que se volaran
los recuerdos
y me quede cautivo
de repente
frente a tu mirada
que no entiende
que un poco de nuestro ayer
aún en mí…
esta presente.
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