Un poco corto... y algo manchado... como la vida.

 Dos calles... 

y cuatro esquinas

naranjos en flores...

y mil campanas...

una fábrica... que anuncia

su edad entre palomas...

1878... 

dice su historia... 

tan grande. . 

que nuestros pasos... 

pequeños...

los miran...

centinela 

de un tiempo inigualable...

nos proteje...

mientras el río... 

desafía al sol...

entre huellas en patas... 

que sueñan mojarras.. 

y arboles añejos...

con olor a   carnavales...

y veredas rociadas de agua en ciestas de verano..

una canilla guarda... varios picos 

de bombitas..  se pinta de colores...

sonrie... 

mientras nuestros lamentamos...

por no tenerlas.. 

desafian malas palabras..

mallas pretadas y mojadas... 

gritos de las vecinas... 

que invitan a dormir...

entre palabras no compartidas... 

un heladero... 

seduce mintiendo...

es de La Ponía... 

entre hielo seco... 

se esconde lo inalcanzable...

un olor a barro y semillas de

paraísos..  hacen de bombas , fuertes..  

y soldaditos... 

 Quizás san la 17 hs y la merienda.. 

termina el suplicio para madres de corazónes y tizas...

Suplican el final de las vacaciones...

mientras los guardapolvos esperan cansados.. 

estar otra vez... un poco cortos...

y algo.. .

manchados.