Le dejó al cielo
su color de ojos
para que las alondras
escribieran con vuelos
de tintas...
sus nombres mas queridos,
y en cada atardecer de otoño
entre hojas caídas
dejo sus huellas
de pasos lentos...
de sabidurías.
de sabidurías.
CONTINUARÁ
No hay comentarios:
Publicar un comentario