Aun nos queda tiempo
para regalarle a la vida
besos compartidos
el perfume de pieles
que no se han dormido.
Aún nos queda tiempo
para regalarle a la noches
estrellas que titilen
al ritmos de un latido
el tuyo...
o el mio.
Aún nos queda tiempo
mientras vivan sueños
entrelazados
sintiendo tu caricia
aquí a mi lado.
Aún nos queda tiempo
y la paciencia es la única
invitada,
la que espera
sin pedir nada,
la que acompaña
al albedrío en sus caminos,
la que calla
la que no duda
la que sabe...
como toda fruta madura
que aún le queda tiempo
para mostrar su frescura.
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