Yo le pedí a la noche,
la luna...
ella no dijo nada...
y me convirtió...
en estrella.
hay poemas que no se guardan, se regalan, es para una sola persona, no es egoìsmo, es una pieza ùnica para el artesano nace de sus palabras y con sus manos moldea con la pluma en ese instante... las expresiones del alma lo màs preciado.
Se descolgó la luna...
como se descuelga las primeras hojas...
en otoños...
desprendiendo sus sueños
sus nostalgias...
desnudandose al mundo...
descubriéndose frente a quienes la juzgan...
amaneciendo... entre nieblas y brisas...
sobre huellas de pastos y barro...
la esperanza descubre... su silencio...
tan auténticos... como sus palabras...
Otoño se presenta...
frente a un tiempo sin memoria
y sin campanas...
bosteza la plaza...
y se pregunta?...
Por qué no hay flores?...
frente a los mismos bancos...
que no dicen nada.
Fuimos un puñado de velas...
en un despertar...
un monton de juegos que no hemos de olvidar...
una vuelta manzana en bicicleta...
un atardecer de verano...
y miles de colores ...
arena, disfraces,
raspones ...
y cientos de caídas para recordar...
una ilusión...
y en una esquinas que nos atrapo...
un beso que uno mendiga...
tu voz y mi voz...
fuimos las huellas que dejan ...
un amor sin amor...
aquella mirada que busca...
alguna ilusión...
fuimos tantos abrazos...
en una misma salida...
palabras bellas sin hipocresía...
fuimos el relato verdadero que nadie creía..
una noche de luna...
que se desvaneció...
fuimos... la plaza, el parque
y un par de campanas...
que nos abrazaron...
fuimos un maso de cartas ...
un cuatro de copas...
un rey sin poder...
gaviotas sin nidos
un alba...
sin amanecer. .
fuimos los dos costados.
un noche buena que no tiene pasado...
un par de siluetas sin sombras
un vaso vacío que muere de sed.
FUIMOS LO QUE SIEMPRE FUIMOS Y NADIE CONECE. Y no ha de volver.
No sé por qué...
pero te espero...
como espera el sol
a la luna...
desde su comienzo...
despertando el tiempo...
acunando sueños
al caminar...
meciendo estrellas
sin tu compañía...
aunque estés lejos yo te siento mía.
No sé por qué...
sigo siendo el mismo...
en la madrugada...
aunque tuve mucho...
nunca tuve nada...
me quedé fingiendo...
mi propia vida...
por no escuchar al corazón...
me quedé sin salida.
Yo te vi...
me mirabas...
me regalabas sueños
cada mañana ...
pintaba estrellas
y entre nubes y nubes...
una escalera...
agradeciendo a la vida...
otra noche nueva...
junte mis deseos ...
lo que yo sentía...
camine despacio sin hipocresía...
abraze mil huellas mientras caminaba...
Y dejé mi piel en tus labios
lo que más
amaba...
desperté de proto...
sin tu compañía...
me morí de apoco...
cuando no fuiste mía.